Estados Unidos-Cuba: medidas en el camino correcto, pero muy limitadas

Esas regulaciones prosiguen el camino de eliminar barreras absurdas que entorpecen las relaciones entre los dos vecinos,a pesar de continuar limitadas en su alcance por la persistencia de una política de agresión contra Cuba que data de la Guerra Fría

Los departamentos del Tesoro y Comercio de Estados Unidos emitieron una serie de me­didas relacionadas con Cuba el pasado 14 de octubre, al mismo tiempo que se hacía pública la directiva presidencial de Barack Oba­ma que deja sentada la política de la Casa Blanca hacia la Mayor de las Antillas.
De la misma manera que ha venido ocurriendo desde el 17 de diciembre del 2014, las modificaciones que entraron en vigor el lunes 17 de octubre demuestran las facultades que con­serva el presidente norteamericano para cambiar la aplicación práctica del bloqueo.
En su mayoría, las medidas buscan ampliar transacciones ya autorizadas en paquetes anteriores, a la vez que se mantiene la prohibición de las inversiones de Estados Unidos en Cuba, excepto en el sector de las telecomunicaciones, que se abrieron en el 2015.
Tampoco se expanden las exportaciones nor­teamericanas a Cuba, más allá de las limitadas ventas autorizadas previamente y que excluyen a los sectores claves de la economía de nuestro país, mayormente de propiedad social.
El sector estatal cubano, donde está empleada más del 75 % de la fuerza laboral, sigue privado de vender sus productos en un mercado ubicado a solo 90 millas y que es el de mayor poder de compra del mundo, con la única excepción de los productos farmacéuticos y de la biotecnología, que se autorizaron en esta ocasión.
Por solo poner un ejemplo, la exportación del Heberprot-P pudiera beneficiar al 5 % de la población estadounidense que al año desarrollan úlcera del pie diabético, enfermedad compleja que en la mayoría de los casos desemboca en la amputación de no ser tratada correctamente.
Este paquete de medidas tampoco aporta nuevos elementos en el área financiera, donde Cuba recibe los mayores impactos del bloqueo. Solo entre abril del 2015 y abril del 2016 y se han reportado 61 incidencias con bancos extranjeros, que alegan la imposibilidad de realizar operaciones con Cuba, debido a la vigencia de las sanciones del bloqueo.
A pesar de que las autoridades norteamericanas aprobaron hace varios meses el uso del dólar por parte de Cuba en sus transacciones internacionales, aún no se han podido hacer depósitos en efectivo o pagos a terceros en esa moneda.
Sigue pesando a nivel internacional el fardo de las 49 multas aplicadas durante el gobierno de Obama a entidades estadounidenses y extranjeras, por un valor que supera los 14 000 millones de dólares, cifra sin precedentes en la historia de la aplicación del bloqueo contra nuestro país, las que provocan temor para relacionarse de forma legítima con Cuba.
Tras esta ronda de medidas, también se mantiene la prohibición a la apertura de cuentas corresponsales de Cuba en entidades financieras estadounidenses, que son imprescindibles para comenzar a normalizar las relaciones bancarias entre los dos países.
Resulta llamativo que la mayoría de las medidas aprobadas son más beneficiosas para Estados Unidos que para el pueblo cubano, porque no se modifica la aplicación del bloqueo en aquellas áreas que son clave para el desarrollo del país.
Uno de los acápites de las nuevas medidas fue malinterpretado por las grandes agencias de noticias internacionales, en cuyos titulares podía leerse que por primera vez en medio siglo Cuba podría vender sus famosos tabacos y su ron de máxima calidad a los «turistas estadounidenses».
Lo que se aprobó fue «la eliminación del límite de hasta 400 USD (de ellos 100 USD en ron y tabaco) para la importación en EE.UU. de productos cubanos para uso personal por parte de estadounidenses o extranjeros, adquiridos en Cuba o en terceros países».
Además, por la Isla no pasa un solo turista con esa nacionalidad, pues estaría violando las leyes que obligan a los estadounidenses a viajar dentro de 12 categorías, entre las que se cuentan intercambios religiosos, académicos, culturales, científicos, deportivos y de pueblo a pueblo.
Otro de los ejemplos de la nebulosa legal en la que transitan algunas de las medidas aprobadas por Obama es el referido a la exportación de «ciertos bienes de consumo, a través de ventas en línea (por Internet), o por otros medios, directamente a personas elegibles en Cuba pa­ra su uso personal.
No se explica en qué consisten dichos productos, pero lo que sí está demostrado es que servicios de grandes compañías como Google, Apple, Oracle y Adobe se mantienen bloqueados para los cubanos, lo cual atenta contra el desarrollo del país en un sector clave y el acceso de los ciudadanos a las nuevas tecnologías.
Si bien las medidas prosiguen el camino de eliminar barreras absurdas que entorpecen las relaciones entre los dos vecinos, lo cierto es que siguen limitadas en su alcance por la persistencia de una política de agresión contra Cuba que data de la Guerra Fría.
Algunas de las medidas aprobadas y sus limitaciones
Salud
Se autoriza:
• El desarrollo de proyectos de investigaciones médicas conjuntas, con fines comerciales o no comerciales, entre personas y entidades de ambos países.
• Todas las transacciones relativas a la obtención de la aprobación por la Administración de Drogas y Alimentos de Estados Unidos (FDA) de productos farmacéuticos cubanos. Esto incluye investigación y desarrollo del producto, ensayos clínicos, revisión y aprobación regulatoria, e importación.
• La importación, promoción, venta y distribución en EE.UU. de productos farmacéuticos cubanos aprobados por la FDA.
• La apertura de cuentas bancarias en Cuba de personas y entidades de EE.UU. vinculadas con las actividades mencionadas anteriormente.
Limitaciones:
• Las medidas se limitan a personas naturales y jurídicas bajo jurisdicción de EE.UU., por lo que no incluye a compañías de terceros países.
• No se autoriza directamente el establecimiento de empresas mixtas para el
desarrollo y comercialización de productos farmacéuticos. Se requiere una licencia específica para dicho efecto.
• No se autoriza el establecimiento de representaciones u oficinas comerciales relacionadas con la industria biofarmacéutica en Cuba.
Viajes
Se autoriza:
• La eliminación del límite de hasta 400 USD (de ellos 100 USD en ron y tabaco) para la importación en EE.UU. de productos cubanos para uso personal por parte de los estadounidenses o extranjeros, adquiridos en Cuba o en terceros países.
Limitación
• Se mantiene la prohibición para la importación de estos mismos productos para su comercialización en Estados Unidos.
Aviación civil
Se autoriza:
• Brindar servicios por parte de personas y entidades estadounidenses a Cuba o a nacionales cubanos, relativos a la seguridad de la aviación civil y la operación segura
de las aeronaves comerciales.
• El tránsito de carga aérea por Cuba, lo cual complementa la licencia general existente para el tránsito de carga por vía marítima.
Limitaciones:
• Imposibilidad para las instituciones cubanas del sector de la aviación de establecer una representación física en Estados Unidos.
• Necesidad de obtener licencia específica para la adquisición de equipamiento para
la seguridad aérea.
Comercio
Se autoriza:
• La exportación de ciertos bienes de
consumo que se venden «en línea» (por Internet), o por otros medios, directamente a personas elegibles en Cuba para su uso personal.
• La eliminación de la restricción de entrada a puertos estadounidenses, para la carga
o descarga de mercancías, de buques extranjeros que hayan atracado en puertos cubanos, sin tener que esperar 180 días, siempre que los artículos transportados a Cuba no se encuentren en la Lista de Control de Comercio del Departamento de Comercio, que incluye equipos de alta tecnología y uso dual.
Limitaciones:
• Los pagos por las exportaciones agrícolas de EE.UU. a Cuba deberán realizarse en efectivo y por adelantado (los financiamientos están prohibidos por ley).
•Se prohíbe a los individuos y empresas estadounidenses invertir en nuestro país a menos que sean autorizados por una
licencia de la OFAC.
• Seguirá aplicándose una política general de denegación de las exportaciones y
reexportaciones de artículos para el uso de empresas estatales, agencias y otras organizaciones del Gobierno cubano que generen esencialmente ingresos para el Estado, incluyendo la industrias del turismo y las vinculadas a la extracción o producción de minerales y otras materias primas, así como para las fuerzas armadas, la policía, los servicios de inteligencia y los órganos de seguridad.

• No se especifican los bienes de consumo a vender por Internet.
Tomado de 26 Digital

Comentarios

Entradas más populares de este blog

¿Aborígenes en Las Tunas?

Del Vimang y otros remedios