El sublime cacho del Atlántico

Ardiente sol e intenso calor, quizás un poco más  agobiantes que en temporadas anteriores, debido a las altas temperaturas que vivimos, asociadas al calentamiento global, caracterizan el presente  verano en el principal balneario tunero.
Hasta La Boca llegan miles de personas cada día en busca de un buen chapuzón y de pasarla lo mejor posible. Y no hay dudas de que “el mar está divino”, como la mayoría expresa, pero también es cierto, como otros bañistas dicen -apelando al alerta de muchos especialistas-  que esa alta exposición a los rayos solares provoca irreversibles daños a nuestra piel.

Por tal motivo un gran número de personas dejan a un lado sus trusas y biquinis y hoy exhiben enguatadas, shorts largos, sobretodos, y los hay un poco más “exagerados” que hasta licras y pantalones y camisas de mangas largas se dejan a la hora del baño.
Sin embargo, es justo encomiar la organización y ubicación de los puntos de expendio de los cuentapropistas, las ofertas de la red de gastronomía popular, las de doble moneda, además de la cantidad de sombrillitas dispuestas a lo largo de toda el área de baño, que aunque aún son insuficientes superan con creces las de temporadas precedentes.
El nuevo punto de venta de la cadena TRD sobresale por su amplitud, belleza y posibilidades de que dispone el bañista de pasar un rato placentero. No menos atractivas resultan las demás instalaciones aledañas, reanimadas para la etapa.
Por doquier se escucha “Lléguese a la buena pizza, al churro, a las trencitas, a la rosita de maíz, al pastel, al helado, a los merenguitos...”. La gama de productos es muy diversa y para todos los gustos, también es bastante amplia la cantidad de pregoneros.
La piña colada está a la orden del día, al igual que el expendio de frutas y hasta la posibilidad de dejar para la historia una instantánea  de su visita a la playa, mediante los fotógrafos al momento, que abundan más que en ocasiones anteriores.
Enamorados que se besan, otros que discuten por una u otra razón, jóvenes que bailan, otros que juegan o practican alguna actividad deportiva, muchos que gustan de beber con cordura o en desmedida, matizan cada jornada en el sugerente balneario del norte tunero.
“La Boca” es “La Boca”, no por casualidad es el más atrayente y visitado tramo costero de la geografía tunera, con su blanca arena, sus aguas cristalinas, el calor de la gente, y por esa magia que tiene de acostumbrarnos a recibir de un solo golpe tanta hermosura.
Agosto se avista, quizás con más calor que el julio que se despide, pero no por ello perdamos la posibilidad de tocar el Atlántico donde más sublime parece regalarse.

Comentarios

Entradas más populares de este blog

¿Aborígenes en Las Tunas?

Del Vimang y otros remedios